Pues bien, como os conté en mi primera entrada, he estudiado Musicología (Historia y Ciencias de la Música) para poder hacer este máster y ser profesor de instituto pero, ¿qué me llevó a ello?
Hace alrededor de 8 años, en 3º de E.S.O., me encontré de nuevo con una asignatura que odiaba con todas mis fuerzas, música. Efectivamente, soy músico pero hace años odiaba la música. ¿Qué ocurrió?
Si habéis liado la primera entrada que os he mencionado antes, os sonará esta historia, pero aquí os lo voy a contar con más detalle.
Ese año, en 3º de E.S.O., me encontré con una profesora maravillosa y con muchas ganas de enseñar, Su nombre es Úrsula. Es una apasionada de la música, tanto clásica como actual, así como una virtuosa con el piano.
Nos enseñó infinidad de cosas, pero lo que más me apasionaba sin duda era tocar con la flauta las canciones que nos ponía en la pizarra, ya que eran canciones actuales (de ese año).
Además de eso, organizamos un coro y una orquesta y tocábamos en numerosos concursos, eventos, graduaciones, villancicos en residencias de ancianos, etc. Era espectacular. nunca había descubierto lo maravillosa que era la música hasta que llegué a ese curso. A continuación os dejo algunos de los mejores momentos del coro y la orquesta de nuestro instituto.
Por supuesto todas las actuaciones se realizaron alrededor de varios cursos, desde la E.S.O. hasta Bachillerato inclusive. Además, cabe destacar que la asignatura de música en Bachillerato es optativa y no suelen ofertarla los institutos, pero ese año Úrsula decidió ofrecerse a impartirla solo para seguir trabajando con nosotros, una gran noticia para todos nosotros. Me enseñó todo lo que sé durante años, tanto teoría musical como los principios básicos del piano. Es la prueba de que si a un profesor le gusta lo que hace y lo enseña con ganas, puede hacerte ver un mundo totalmente distinto.
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